Los labios son suaves, de formas redondeadas y están llenos de receptores que los hacen extremadamente sensibles. Su color rosado se debe a que están recubiertos por menos capas de piel que el resto del cuerpo.

Para lograr un maquillaje perfecto de los labios hay que hacer algo más que pasarse rápidamente un lápiz cremoso o un brillo. Hay que tener en cuenta detalles como el tono de la piel, el color de los ojos y la forma del rostro. Pero también hay que prestar especial atención a la boca, ya que con ayuda de un delineador se pueden corregir imperfecciones o acentuar virtudes.

CONSEJOS GENERALES

• Los productos recomendados para el maquillaje de labios son unos pocos. Pero antes, hay que verificar si están resecos o ajados, en cuyo caso conviene tratarlos con manteca de cacao o unas gotas de vaselina. Otra forma de protegerlos es con el uso del “primer”, que es una barra especial incolora, que hidrata y prepara la piel para el maquillaje, lo fija y ayuda a que dure más tiempo.

• Una vez lograda la humectación, se define la forma. Para corregir o definir los labios se utiliza un delineador especial similar al de los ojos pero en tonos que van del beige al rosado intenso. Viene en forma de lápiz o como una especie de “marcador” que permite mejor definición, ya que se logran trazos más finos y precisos. Para las más decididas, este delineado se puede lograr en forma permanente con una dermopigmentación, que es un tatuaje que define la forma. Es mucho más cómodo, pero tiene un riesgo: es difícil y caro para remover si no nos gusta el resultado.

• Los labiales pueden ser las clásicas barras cremosas brillantes o mate, que también vienen en pequeños potes; o los brillos transparentes o con color. La mejor forma de aplicar los primeros con éxito y un resultado impecable es con un pincel chato. Toma algo más de tiempo, pero queda mucho mejor, y se pueden rellenar los labios respetando el contorno definido con el delineador.

• En lo posible, elegir productos de buena calidad y larga duración, ¡que no se vayan con el primer beso, con una taza de café o un vasito de agua!

LABIOS GRUESOS O BOCA GRANDE

Los labios gruesos y carnosos como los de la China Suárez o Lali Espósito son muy sensuales, pero no van bien con cualquier color. Se puede delinear su contorno con un lápiz de un tono más oscuro que el de la piel, siguiendo la forma natural. Esto ayuda a que parezcan algo más pequeños. Luego se pintan con un labial o un brillo, recordando que conviene que este no sea excesivo, y que es preferible evitar los tonos muy claros.

Una boca grande como la de Nazarena Vélez puede ser atractiva, pero algunas personas prefieren no llamar la atención con este atributo. En este caso, se puede reducir visualmente usando labiales de tonos parecidos al de los labios, mate o con poco brillo, aplicándolos solamente en la zona central y alrededores, sin llegar a las comisuras.

LABIOS FINOS O BOCA CHICA

Para resaltar unos labios finos como los de Griselda Siciliani y lograr que parezcan más llenos conviene comenzar por perfilarlos. Lo ideal es usar un lápiz delineador para labios en color beige, rosado o del mismo tono del pintalabios. Hay que evitar delinear por fuera de la línea de los labios, ya que el efecto logrado sería demasiado artificial. Luego, aplicar un brillo espeso y reluciente de un color vivo y evitar los tonos oscuros u opacos, que tienden a achicar, tal como ocurre cuando elegimos una prenda negra para parecer más delgados.

Una boca pequeña se puede “agrandar” con un delineado que se extienda bien por el borde de las comisuras del labio superior y por el contorno natural del labio inferior, pero sin pasarse. Luego se aplica un labial y encima un brillo.

LABIOS ASIMÉTRICOS

Se llaman así cuando el arco superior, conocido como arco de Cupido, es más fino o más grueso que el inferior. Lo más habitual es que el labio superior sea más fino que el inferior, pero con un buen maquillaje se puede lograr una proporción adecuada, reduciendo o creando sensación de volumen donde haga falta.

Para reducir el volumen, delinear el labio más grueso por su línea natural. Si se busca, en cambio, dar sensación de mayor volumen, se perfila el labio más fino por el contorno exterior. Luego se aplica un labial de un tono más claro en el labio fino y otro de la misma gama pero un poco más oscuro, para el labio más grueso. Puede resultar un poco complicado tener que usar dos tonos distintos de labial, pero los resultados valen la pena.

LABIOS CAÍDOS

A veces ocurre que los labios tienen las comisuras hacia abajo, lo que da sensación de tristeza. Esto se puede corregir con un delineado usando un lápiz beige o carne que siga el contorno natural de los labios. En la comisura no hay que seguir esta línea, sino dirigirla ligeramente hacia arriba, ¡sin exagerar! Una vez listo este perfi lado, se rellenan los labios sin pasarse del delineado.

¿Qué color de labial elegir según el tono de piel?

Piel clara: quedan muy bien los labiales y brillos en tonos pastel o cálidos como el naranja, fucsia, carmín y marrón. Para la noche, rojo cereza.
Piel media: los tonos que resaltan mejor los labios son los tierra, los dorados y cobrizos, los corales y los rosados. Para la noche, rojo intenso.
Piel oscura: conviene elegir colores que resalten los labios, como el fucsia, el cereza o el terracota. Para la noche: rojo borgoña.