En ocasiones cocinamos arroz de más y no se nos ocurre qué hacer con lo que queda. Pero, aunque tenga cebolla y manteca, o incluso algún otro ingrediente, es posible reutilizar las sobras y convertirlas en otro plato. Debajo detallamos algunas posibilidades para darles nueva vida:
• 1. Tortilla.
Es una de las soluciones más fáciles y sabrosas. Para empezar, se pica un poco de cebolla y de morrón, y se rehogan en aceite. Luego se le añade al arroz junto con dos o tres huevos. Se mezcla todo y se cocina en una sartén por ambos lados. Es ideal para los más chicos.
• 2. Buñuelos.
Al arroz frío debemos añadirle alguna verdura (por ejemplo, zanahoria rallada, brócoli cocido, zapallitos o berenjenas), queso rallado y un par de huevos. Luego se le agrega harina leudante hasta que la mezcla se integre. El paso siguiente es freírlos en abundante aceite y retirarlos cuando estén dorados de ambos lados.
• 3. Verduras rellenas.
Es ideal para los días fríos. Para esta receta se debe utilizar la misma cantidad de arroz que de carne picada. Una vez que la mezcla está condimentada con sal y pimienta, se la utiliza para rellenar ajíes, berenjenas y papas (peladas y ahuecadas con cucharita). Luego se colocan en la cacerola con salsa de tomate, rodajas de zanahoria y cebollas, hasta que la carne y las papas estén cocidas.
• 4. Ensalada.
Para elaborar esta sabrosa ensalada se le agregan al arroz arvejas cocidas, granos de choclo, zanahorias cocidas cortadas en cubitos, jamón fileteado y aceitunas negras. Para sazonarla se recomienda un buen aceite de oliva y vinagre de manzana. Es especialmente recomendable para días de mucho calor, porque se come frío.
• 5. Hamburguesas.
Para la preparación, necesitamos hojas y tallos de remolacha hervidos y picados. A eso le añadimos arroz, queso rallado, panceta salteada y cebolla picada salteada. Sazonamos con sal, pimienta y nuez moscada. Para unificar la mezcla utilizamos uno o dos huevos. Para terminar y que la masa quede maleable, le agregamos pan rallado o avena arrollada. Por último, le damos forma de hamburguesa (a mano o con molde) y colocamos en una placa al horno con una pincelada de aceite. Se retiran cuando están doradas.