En época de vacaciones, algunos se entusiasman con la idea de tener una mascota sin comprender la responsabilidad que conlleva. Cuidarla, sacarla a pasear y alimentarla constituyen un verdadero trabajo. Ahí es cuando surge la pésima decisión de abandonarlas en la vía pública. ¿Qué podemos hacer cuando vemos un animal sin dueño? La veterinaria María Florencia Presa nos sugiere los pasos a seguir.

1. Primer encuentro. Al ver un perro o un gato en la calle, lo primero que hay que hacer es fijarse si tiene collar y, de ser así, contactar a sus dueños. Si el animal está con miedo, nunca sabemos cómo puede reaccionar, por eso hay que llamarlo y esperar a que se acerque. Nosotros nunca debemos acercarnos, porque lo puede tomar como una agresión.

Una señal que indica que se trata de un animal amigable es que nos siga. “Si lo vamos a llamar para que se acerque, es mejor agacharse para estar a su altura y no ser visto como una amenaza. Si tratamos de acariciarlo, debemos tener cuidado; es mejor dejar que nos huela primero. Estos recaudos son especialmente importantes cuando notamos que el perro o el gato están nerviosos. Si el animal se muestra amigable, se acerca y mueve la cola, es más fácil de llevar”.

2. Llevarse el animal. Una vez que lo agarramos, debemos decidir si nos lo quedaremos o lo llevaremos a un refugio. Para descartar que alguien lo esté buscando, se aconseja tomarle fotografías y publicarlas con un contacto en veterinarias y plazas de la zona donde fue hallado. Si nadie lo reclama y decidimos adoptarlo, hay que llevarlo al veterinario antes de ingresarlo a la casa, para que lo revisen, chequear su salud, constatar si tiene heridas, desparasitarlo, eliminar pulgas y garrapatas. “No recomiendo vacunarlo en el momento, pero sí hacer una desparasitación interna y externa”.

3. Aislamiento. En la casa, es importante aislarlo por 30 o 40 días, para observar si tiene alguna enfermedad y que no contagie ni a las demás mascotas ni a la familia. Ese tiempo de adaptación requiere de cuidados y buena alimentación. Una vez cumplido el plazo, hay que llevarlo a la veterinaria para darle las vacunas.

4. Castración. Los perros y los gatos deben ser castrados para evitar que se reproduzcan. Las crías son muy difíciles de ubicar entre familiares y conocidos, y los refugios desbordan de animales.  

5. Refugios. Si no podemos conservar al animal, hay que contactarse con refugios donde puedan tomarlos para que sean adoptados. Algunos son:
– el Movimiento Argentino de Protección Animal (www.mapaveterinarias.com), 
– Adopteros Argentina (www.adopterosargentina.com), 
– Fundación de gatitos (www.fundaciondegatitos.org.ar),
– Hogar de protección Lourdes (www.adopteungatito.org),
– Ayuda Can (www.facebook.com/ayudacan/).