A la hora de vestirse, hay principios que conviene tener en cuenta para lograr una figura más armoniosa y atractiva. Y si vamos a elegir un pantalón, esa prenda tan práctica para cualquier momento del día, antes que nada, debemos tener en cuenta qué telas y colores debemos usar para que la indumentaria se convierta en nuestra aliada. Para eso, revista EXPERTAS entrevistó a la licenciada en Publicidad y experta en asesoramiento de imagen personal Caro Ghidotti, quien nos dio las siguientes sugerencias:
- Evitar los pantalones de telas gruesas o con textura como el corderoy.
- Decir no a los volados, bolsillos y detalles que llamen la atención.
- Nada de estampados de cuadros o flores grandes, dibujos llamativos y brillos. Siempre es mejor apostar por las telas lisas.
- Los jeans calzan mejor si son elastizados.
- Los colores que más “adelgazan” son el negro, el azul marino y el gris.
Ahora bien, ¿qué diseño de pantalón o jean va mejor con nuestra silueta? Esto depende de los distintos tipos de figura.
Triángulo
Las caderas son redondeadas y más anchas que los hombros.
Se puede armonizar la figura con prendas que resten volumen a la zona inferior del cuerpo, como un pantalón de tela más bien fina y con buena caída, sin estampado ni brillo. Lo ideal es un modelo recto o levemente ancho en la botamanga, con tiro medio o alto. Para la parte superior, una prenda clara con algún detalle llamativo para desviar la atención hacia esta zona del cuerpo.
A tener en cuenta: cualquier línea horizontal que caiga sobre la zona de cadera, ya sea la terminación de la prenda superior, un cinturón o una costura, suma peso visual a esta zona.
Reloj de arena
Las caderas tienen la misma proporción que los hombros. La cintura está bien definida.
Este tipo de cuerpo es el que se considera más armonioso. Se pueden usar sin problema todos los modelos de pantalón, incluso los estampados, pero sin abusar de los tejidos demasiado gruesos, ya que suman volumen. En este tipo de cuerpo conviene resaltar la cintura, y las mujeres altas pueden usar chupines y pantalones acampanados.
Triángulo invertido
Hombros anchos, cadera angosta y cintura poco definida.
Una elección adecuada de la indumentaria puede ayudar a restar estructura de los hombros y resaltar la cadera. Para la parte superior, conviene elegir prendas de telas finas, que marquen líneas verticales. Los pantalones ideales son los que tienen costuras horizontales en la zona de la cadera o formas rectas que visualmente aporten volumen. Los tejidos convenientes son los que tienen más cuerpo, con estampados de motivos grandes o colores contrastantes, claros o luminosos. Los bolsillos traseros pueden sumar volumen a las nalgas, al igual que los bolsillos laterales o las pinzas en la cintura.
Rectángulo
Los hombros, la cintura y las caderas tienen un ancho similar.
Conviene definir la cintura sumando algo de volumen a los hombros y la cadera para compensar las formas lineales del cuerpo. Así, la figura se logra volver más sinuosa. Los pantalones más sentadores para este tipo de cuerpo son los rectos y también los Oxford o acampanados, que se acompañan con calzado alto.
Hay que evitar los pantalones muy ajustados, ya que ponen en evidencia la falta de curvas, y elegir telas con buena caída y estampados geométricos, en especial en la mitad superior del cuerpo. Conviene usar cinturones para marcar la cintura y evitar los jeans muy sueltos, porque lo que se busca es generar un físico con curvas.
Óvalo o manzana
Los hombros, el abdomen, la cintura, la cadera y las piernas tienden a la redondez.
En este caso, se busca dar estructura a la figura para que se vea más estilizada. Las prendas deben ser de tejidos finos con buena caída y peso; evitar las telas gruesas o rígidas.
Los pantalones ideales son los de corte recto con cierre lateral y cintura angosta, algo sueltos, pero no tan holgados como para dar aspecto de bolsa.
Guitarra
Cintura estrecha con cadera y nalgas redondeadas.
Esta figura tan femenina se debe resaltar cuidando los volúmenes para no sumar peso visual. Los pantalones ideales son los rectos; se les puede sumar un cinturón que resalte la cintura sin ajustar y cuidando que nunca caiga sobre la cadera. Conviene elegir prendas algo sueltas, ni muy anchas ni muy angostas, que dibujen el cuerpo. Las telas ideales son las de buena caída y poco peso; evitar las rígidas como el corderoy, los tejidos brillantes y los estampados geométricos.