Biografía
Tiene 34 años, es porteña. Comenzó a hacer teatro a los siete años, y a los diez integraba el elenco de Magazine For Fai. Formó parte de múltiples ficciones, en teatro y en televisión (Costumbres argentinas, Enséñame a vivir, Hechizada, Solamente vos, Esperanza mía, Educando a Nina, Fanny la fan, Vengo por el aviso, Segundo set, El huevo, ParaAnormales, entre otras), y este año iba a estrenar una película que finalmente la pandemia postergó. Junto a Ezequiel Tronconi escribió y protagoniza la serie Lucio y Lucía, que en breve verá la luz.
¿En qué te considerás experta?
Haciendo chocotortas y lavando ropa.
¿Qué es lo que más disfrutás hacer en tu tiempo libre?
Estar con mi pareja, me divierto mucho con él. También con amigos y en familia. Disfruto mucho de leer, dormir, cocinar y mirar películas.
¿Cómo te imaginás dentro de veinte años?
Intento no pensar mucho para adelante, y conectarme con el aquí y ahora. Pero me imagino estando donde quiero estar, plena, viajando por destinos nuevos. Viajar es mi gran pasión.
Si no hubieras sido actriz, ¿a qué te habrías dedicado?
Tal vez me hubiera gustado ser bailarina o música. Quizá tenista o futbolista. Me fascina la astronomía, pero dudo que me hubiera dedicado a eso… También me gustan mucho la psicología y la filosofía.
¿Usás redes sociales? ¿Cuáles? ¿Te cuesta desconectarte?
Sí, las uso porque me dedico a algo público y artístico, pero comencé a usarlas hace poco. Realmente no las consumo mucho. Solo tengo Instagram y Twitter, Facebook nunca tuve.
¿Sos de ir al supermercado?
Sí, me gusta. Cuando estoy de viaje en otros países me fascina entrar a supermercados, pasear por las góndolas y ver qué productos tienen. Me divierte.
¿El mejor regalo que recibiste?
Para mi cumpleaños de treinta, mi mamá me regaló un viaje que hicimos juntas a Nueva York. Fue un viaje maravilloso.
¿El mejor recuerdo de tu infancia?
Tuve una infancia hermosa, tengo grandes recuerdos. Entre ellos, la primera vez que actué en mi vida. Hice de oveja: solo entraba, hacía un “meeee” y salía. Recuerdo ensayar y ensayar el balido. Mi mamá me armó todo el disfraz a mano y yo estaba fascinada.
¿Tu recuerdo más viejo?
Entrando a mi primera casa, a upa de mi papá y junto a mi mamá y mi hermano. Tenía dos años.
¿Tus tres objetos favoritos?
Unos anteojos que eran de mi abuela que amo, mi libreta de anotaciones de viajes y un muñequito que tengo de chica, que es mi amuleto de la suerte en mis viajes.